Enfermarse es uno de los primeros grandes Dramas de Casa cuando recién has volado del nido, por eso queremos prevenirte de un gripón épico (de esos que todo el mundo está contagiando) con los siguientes 5 consejos que debes tomar en cuenta si no quieres tener que prepararte tu propia agua de limón (que jamás sabrá como la de tu mamá) y poner la alarma del celular para recordarte la toma de las medicinas.

 

1. Pies calentitos

Los pies son un reflejo muy importante de nuestro estado anímico por todas las terminaciones nerviosas que hay en ellos.   Evitar tener los pies fríos (sobretodo con estos cambios tan drásticos de temperatura) ayudará a que tu cuerpo tenga una temperatura promedio y que no te dé tanto frío, por lo mismo, es mucho menos probable que te enfermes.

Antes de la existencia de los calcetines «peluchedos» y de las botas Uggs, los bisabuelos recortaban una especie de  plantillas en papel periódico para mantener sus pies siempre calientes.  Esto no quiere decir que le pegues periódico a tus huaraches, solamente ten cuidado de no mojarte los pies en temporada de lluvias.

 

2. Cebollita humana

El clima en la Ciudad de México cambia por minutos.  Podemos amanecer a 8 grados pero estar a 19 a medio día, culminar con hermosos 29 grados a las 2 de la tarde y para las 8 de la noche volver a tener frío porque la temperatura descendió a 10 grados.

Es imposible poder vestirte con menos de 4 prendas en esta temporada, por eso recomendamos el look «cebollita»,  esto es, vestirte por capas.

Puedes empezar por una capa sencilla (pantalón y camiseta de algodón, blusa/camisa, suéter, impermeable o saco).  De esta manera, puedes vestirte y desvestirte al más puro estilo «cebollita» jugando con las capas del atuendo del día.

 

3. Hidratación

Hay que hidratarse diariamente tomando entre 2.5 y 3 litros al día, pero te la vamos a poner fácil;  no tienes que andar paseando botellas por todos lados,  puedes beber tés (de preferencia sin cafeína) y muchas sopas (caldos), estos serán de gran ayuda para cumplir con tu «cuota» de agua diaria y te ayudarán a estar siempre bien  hidratado.

 

4. Vitamina C

¿Mareado de que te repitan 209348203 veces que debes tomar Vitamina C? Bueno, ahí te va una vez más: ¡Toma vitamina C!

La vitamina C además de ayudar a tu sistema inmunológico a levantar defensas, tiene un gran aporte energético natural. Si el cansancio está sobrepasándote, intenta tomar 2 pastillas de vitamina C a lo largo del día y verás que el efecto es más poderoso que el de la misma cafeína.

Ojo! No vale tomar gomitas de vitamina C ni vitaminas de Los Picapiedra.  Compra un frasco de vitamina C en la farmacia o en las tiendas especializadas en vitaminas y suplementos alimenticios.

 

5. Di no al aire acondicionado

Es muy tentador vivir en el eterno invierno (sobretodo cuando en la calle hay 29 grados), pero el aire acondicionado es el enemigo número uno del cuerpo porque éste se tiene que ajustar a una temperatura artificial en cuestión de segundos para luego nuevamente volver a salir al calor.  Mucho cuidado con esto!  Procura ahorrarte el aire acondicionado si tienes las defensas bajas o estás especialmente cansado ya que puede ser el pase directo para un gripón épico.

 

 

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