Muchas veces creemos que al cargar a nuestro perro lo estamos ayudando o protegiendo, lo que no sabemos es que lo ponemos en riesgo de alguna enfermedad o daño físico. Aquí te dejamos tres razones importantísimas para que evites cargarlo lo más posible:
Sus patitas
¿Te pasa que cuando estás mucho tiempo hincado o en posición de cuclillas y se te entumen las piernas? ¡Lo mismo le pasa a tu perrito! Cuando lo cargamos se le doblan las patitas y terminan muy entumidos. Por lo mismo, ¡evita a toda costa las bolsas para cargarlos! No les estás ayudando, al contrario.
Ejercicio
Al igual que el ser humano, los perros necesitan hacer ejercicio. Para ellos es indispensable caminar, correr y saltar; aquí te dejamos cómo entrenarlo.
Convivencia con otros perros
Privar a tu mascota de que conviva con otros perros sólo puede provocar que sea tímido, introvertido e inseguro. Si ves que se acerca a un perro más grande que él, sólo ponte alerta, no lo cargues inmediatamente pues esto lo hará nervioso y muy temeroso de su entorno.
Excepciones
Sí hay ocasiones que representan un peligro para nuestros perros, (en un lugar con muchos autos, si está lastimado, si hay muchísima gente, etcétera). Hay que saber cómo cargarlos para no incomodarlos o incluso lastimarlos:
Aires de Septiembre Siguiente Drama:
¿Mal aliento? Elimínalo con estos alimentos