Por las fotos de todo lo que ingieres
A todos nos da muchísimo gusto que tengas una vida tan gourmet, pero de verdad, no es necesario que le tomes una foto a cada uno de los platillos que vas a degustar. No nos interesa si (mínimo) no va de la mano con la receta de cómo hacerlo.
Por abusar de las autofotos
Te juro (TE LO JURO!), todos hemos pasado por ahí y hoy por hoy sabemos detectar perfecto las autofotos que te tomaste en el baño o en el coche el día que te acabaste de arreglar y dijiste: hoy salgo a matar! El furor de las autofotos ha muerto, ahórratelas (ahórranoslas).
Por cierto, las autofotos de las personas que usan lentes son un suicidio social.
Por tus mensajes “encriptados”
Si siquiera siendo un agente secreto en una misión encubierta o un espía como los que había en tiempos de Guerra que salen en las películas, tienes que poner mensajes encriptados para añadir un toque “misterioso” a tu personalidad. Esto solamente da pie a que el 50% de tus amigos te pregunten por qué estás poniendo esto y pases medio día respondiéndole a cada uno de ellos.
Nos referimos a mensajes encriptados del tipo:
– Paciencia…
– En shoooock!
– Decepcionad@ de quien menos esperaba…
– Decisión tomada…
– Todo cambia…
– Extrañando…
– Y…
– No puedo decirlo…
Por los Memes
¿Qué crees? El Meme que se te hizo espectacular, reíste horas y con el que flipaste, seguramente ya lo pusieron 28 personas más en el timeline de tus amigos. A menos que tú inventes uno, ahórrate el tiempo de “compartir” en el muro Memes que se viralizarán en cuestión de minutos y solamente contribuirás a la contaminación visual de Facebook.
Por subir TODAS las fotos de tus vacaciones
A tus amigos les da mucha felicidad saber que te fuiste de vacaciones y seguramente le darán “like” a varias de las hermosas fotos de los paisajes que tomaste, pero… No es necesario subir TODAS las fotos. Es frustante ver que la misma persona tiene más de 200 fotos de un viaje y que no filtró siquiera las que salen movidas. Consejo: No subir más de 30 fotos por álbum.
Por subir y taggear las peores fotos de tus amigos
Con la llegada de las mamás y tías a Facebook, este es un tema delicado (sobretodo por los comentarios que van a surgir a raíz de esto), además de los ex que rondan por ahí para quienes nos esmeramos por siempre estar espectaculares en nuestras fotos. Sé prudente con las fotos que subes de los demás y procura ponerlas en privado antes de hacerlas públicas para que sean “aprobadas”.
Por tus tags en productos, invitaciones y fotos ajenas
Es muy lindo detalle querer involucrar a tus amigos en algún proyecto o invitarlos a un evento o anunciarles que estás vendiendo guantes tejidos a mano, pero por piedad, deja de taggearlos! Esto en vez de ser algo positivo se convierte en una acción negativa y la gente se destaggea de inmediato y no quiere volver a saber nada de tus productos o eventos.
No uses Facebook para estas cosas, mándalas por mail o mensajes directos.
Por las fotos de tus pies
¿Por qué? ¿Para qué? ¿A quién le puede interesar? Si bien hay gente que tiene un fetiche especial por los pies, a la gran mayoría del resto del mundo no le interesan y, por el contrario, les parece una de las menos estéticas partes del cuerpo humano. Si vas a subir fotos de tus pies porque sabes que a alguien le vas a volar los sesos de la emoción, ponlas privadas para que solamente esa persona lo vea.
Por compartir y discutir tus posturas políticas, religiosas y deportivas
La gente te quiere como eres por lo que eres, no por lo que opines sobre religión o política. Esos mensajes en los que ahondas sobre la renuncia del Papa, del caso de Elba Esther o del último partido no le interesan a nadie más que a ti. No eres más o menos importante por opinar, pero mejor guarda esos comentarios para el día que están todos juntos cenando y tomándose unas cervezas para externarlos.
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