Hacer arroz es todo un arte… Cuando mis roomies lo cocinan siempre les queda duro, o se les pega en la olla terriblemente. No todos tenemos la suerte de contar con una arrocera, así que a continuación te damos algunos tips para que éste te quede perfecto.

Que no se pegue

1. Antes de cocinarlo, coloca en la olla con agua una cuchara de aceite. Espera a que hierva y échale el arroz. Revuelve y baja un poco el fuego. Inmediatamente tapa la olla y deja que el arroz se coza durante quince minutos. Apaga el fuego y deja reposar el arroz durante cinco minutos. Escúrrelo y listo.
2. Otro secreto es echarle al agua el zumo de medio limón: incorpora el arroz y cuando el agua comience a hervir, muévelo en el sentido de las manecillas del reloj con un tenedor para evitar que se peguen unos granos. Después tapa la olla y reduce el fuego. Cuela el arroz y colorín colorado.

Arroz esponjado, no batido

1. Lava el arroz tres veces. Cada que lo laves, frótalo con tus manos como si lo tallaras. Notarás que a la tercera vez, el agua estará transparente. Quiere decir que lo desalmidonaste y está listo.
2. Otro secreto es usar la medida perfecta: 2 tazas de agua, por cada taza de arroz. Déjalo al fuego y al momento de que hierva, baja la flama y tápalo. Sólo espera a que se evapore el agua.

Arroz realmente blanco

1. Para que el arroz quede bien blanco, añade a la cocción unas cuantas gotas de jugo de limón, o  de vinagre.

Arroz quemado

1. Si se te quema el arroz enjuágalo con abundante agua. Vuélvelo a echar a una olla, añade agua, sal y pan molido. Enciende el fuego y en cinco minutos se le quitará el sabor a quemado.

Arroz duro

1. En caso de que esté duro, quítalo del fuego, coloca un paño húmedo encima de la cazuela durante 5 minutos, destápalo y déjalo reposar 5 minutos más. Vuelve a repetir lo mismo si continúa duro.

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